viernes, 17 de diciembre de 2010

Año Biciesto - (grito ahogado de atención)

Que me regales un día de tu vida útil. Una escapada de lo cotidiano. Un silencio en la rutina. Sin consecuencias, repercusiones, ni presentes. Sin ellos, sin éstos, sin porqués. 
Haceme un té y dame la mano. Escuchame quejarme y entretenete con mi pelo. Quereme y enseñame. Mostarme cómo se hace y tapame si me da frío después. Arrugame la ropa. Contagiame lo positivo y explicame lo complicado. Sé lindo para que no me moleste y dejame decirte que te quiero. Dejame decirte que te quiero. No me dejes, bajo ningún concepto. 
Regalame un 29 de febrero en el medio de la nada. (Eso sí, pobres de las horas que me despierten el 1º)


[No me juzgues por quererte todavía. Es que hoy me cuesta mucho acordarme que ya no te quiero]